El viernes 27 de marzo, Bogotá cumplió una semana en cuarentena. El miedo irracional a quedarse sin víveres hizo que muchos días antes de arrancar este ejercicio ciudadano preventivo, se aprovisionaran como si viniera una hambruna sin precedentes.
Por paradójico que parezca, el panorama de estos días ha sido todo lo contrario: a Cora-bastos ha llegado más toneladas de comida delo usual.
El día jueves 19 de marzo (un día antes de comenzar el aislamiento) Cora-bastos se puede decir que colapso, desde las 7:00 pm (hora que usualmente ingresan los alimentos a Cora-bastos) hasta el siguiente día aun no terminaba el ingreso de estos víveres, cosa que en realidad impacto tanto a comerciantes como a compradores.
Teniendo en cuenta la aglomeración de personas que ingresan a esta central de alimentos se tomó la medida “pico y cédula” que básicamente se trata que las personas cuya numeración de su cedula termina en par ingresan un día y los impares otro.
Escrito por: Jennifer Katherine Buitrago Ortíz